Un embarazo ectópico es aquel que tiene lugar fuera del útero, generalmente en alguna de las trompas. La causa más común por la que se suele dar este tipo de embarazo es por alguna malformación, estrechamiento u obstrucción de alguna de las trompas de Falopio, que impiden que el embrión descienda y realice su recorrido normal hasta implantar en el útero.
Encontramos otros factores que pueden aumentar el riesgo de aparición:
– La enfermedad inflamatoria pélvica (EIP)
En el 50% de los embarazos ectópicos existe este antecedente clínico. También conocida como salpingitis, puede ser provocada por alguna enfermedad de transmisión sexual, el agente causal más conocido es un tipo de Clamidia.
Esta enfermedad cursa con inflamaciones de las estructuras pélvicas, el útero y las trompas de Falopio, provocando un impedimento mecánico en el paso del embrión hacia el útero.
– Endometriosis
La endometriosis se define como un crecimiento de tejido endometrial fuera del útero. Si ésta se localiza en las trompas de Falopio puede provocar una alteración en las mismas o en el espacio tubo-ovárico.
– DIU (Dispositivo intrauterino).
El dispositivo intrauterino puede aumentar el riesgo de contraer una infección pélvica o causar inflamación de las trompas, e indirectamente aumentar el riesgo de embarazo ectópico. En los DIU que liberan progesterona se sabe que esa hormona puede provocar un movimiento más lento del embrión a través de las trompas.
– Embarazos ectópicos previos.
Este factor va normalmente asociado a otros pero se estima que aumentan un 15% el riesgo de embarazo ectópico.
– Cirugía previa en las trompas de Falopio.
La ligadura de trompas o una posterior recanalización tubárica pueden aumentar el riesgo ya que pueden provocar el desarrollo de adherencias peritoneales.
– Tabaco
El riesgo de padecer embarazo ectópico se multiplica por dos cuando la mujer fuma más de 20 cigarrillos al día. Este riesgo es debido al efecto tóxico de la nicotina en el medio tubárico.
– Técnicas de reproducción asistida (TRA)
Si nos centramos en los embarazos ectópicos provocados por las técnicas de reproducción asistida, concretamente por la fecundación in vitro, ya sea mediante FIV convencional o mediante ICSI, una posible causa por la que los embriones pueden salir fuera de la cavidad uterina se debe en parte a la propia técnica de la transferencia de embriones, donde influye el volumen de líquido que se transfiere, la localización de la cánula de transferencia en el fondo uterino y la manipulación uterina.
Una de las ventajas que podemos encontrar en estas técnicas es que proporcionan un rápido diagnóstico del embarazo ectópico, ya que la realización del análisis de la beta-hCG para confirmar si existe o no embarazo y una posterior ecografía vaginal, nos aporta información de si el embrión ha implantado en el útero o fuera de éste.
Sospecharemos que existe embarazo ectópico si nos encontramos con un resultado de beta- hCG positivo y una ecografía donde no se observa ningún saco embrionario en el útero. Este resultado habrá que confirmarlo posteriormente mediante nuevas analíticas.